Los viajeros cada vez están más concienciados de la necesidad de cuidar los bosques, pues juegan un papel crucial para la biodiversidad al ser “sumideros” naturales de carbono. En España existe el compromiso de reforestar 20.000 hectáreas al año entre 2020 y 2050. Aquí encontrarás miles de hectáreas de bosques en las que vivir un sinfín de experiencias respetuosas con el entorno. Cuando los visites, descubrirás que son hogar de múltiples especies y que sus rincones todavía conservan las historias de antiguos habitantes. Disfruta de diferentes actividades sin olvidarte de cuidar la Tierra.
Ver de cerca a osos
Ver a estos animales salvajes en su hábitat natural es una vivencia inolvidable. ¿Dónde lo podrás hacer? La Cordillera Cantábrica es el destino ideal. En concreto, Asturias es el reino del oso pardo cantábrico, una de las tres especies de oso pardo que hay en Europa. En zonas como el Parque Natural de las Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias o en el Parque Natural de Somiedo varias empresas locales organizan observaciones. Un guía-monitor te facilitará prismáticos. También en Asturias podéis hacer en familia la Vía Verde Senda del Oso -que discurre sobre una antigua vía de ferrocarril minero- y conocer a las osas Paca y Molinera. ¿Más zonas donde contemplar osos? El Parque Natural de Saja-Besaya (Cantabria), los Pirineos o el Parque del Hosquillo (Cuenca).
Acercarse a bisontes
¿Qué te parecería visitar una reserva natural de bisontes y descubrir cientos de curiosidades sobre estos grandes mamíferos? Bison Bonasus es una asociación sin ánimo de lucro que se encuentra en San Cebrián de Mudá (Palencia). Cuenta con alrededor de 20 hectáreas en las que los visitantes pueden ver en semilibertad a estos animales, un albergue, un observatorio astronómico y monitores que se encargarán de convertir tu visita en un día para el recuerdo. El principal objetivo de este proyecto es recuperar este animal histórico del que en el año 1927 no quedó ningún ejemplar caminando libre por el mundo.
Dormir en un árbol
¿Quién no ha soñado alguna vez con pasar una noche en la “casita del árbol”? En España existen infinidad de bosques con espacios adaptados en los que se han construido cabañas ecológicas y sostenibles tanto en extensos prados a ras del suelo, como encima de los árboles. Este tipo de establecimientos están organizados de manera que las cabañas están lo suficientemente separadas entre sí para mejorar la experiencia de dormir en contacto con la naturaleza. Lo más probable es que el único sonido que tengas de fondo sea el canto de los pájaros. El bosque de Sant Hilari Sacalm (Gerona), el valle de Ultzama (Navarra), Zeanuri (Vizcaya), Outes (A Coruña), la Sierra de Gata (Cáceres) o la Sierra Norte de Madrid son solo algunos de los sitios en los que podrás vivir esta experiencia.
Descubrir obras de arte escondidas
¿Has oído hablar del Land Art, una corriente artística en la que se fusionan paisaje y creación? En España encontrarás diferentes lugares así. Por ejemplo, el Bosque de Oma (País Vasco), un espacio mágico creado por Agustín Ibarrola. ¿Seréis capaces de encontrar las casi 50 obras de arte escondidas en los troncos de los árboles? Otro ejemplo: en la Sierra Norte de Madrid hallarás el conocido como “Valle de los Sueños”, en el que más de 60 escultores han creado más de 100 obras de arte de una belleza excepcional. No muy lejos de Madrid, en Cuenca, puedes hacer en familia la “Ruta de las Caras”. Este paraje natural en el pantano de Buendía está formado por una veintena de esculturas de hasta seis metros de altura que se empezaron a esculpir en 1992 en plena roca. También os dejarán boquiabiertos obras de arte “imposibles” e inspiradoras en el Parque Natural Las Batuecas (Salamanca) o en el desierto de Monegros (Navarra).
Darse “baños de bosque”
¿Has escuchado alguna vez esta expresión? Significa reconectar con el entorno, caminar entre árboles, apagar cualquier dispositivo electrónico y poner los cinco sentidos en la naturaleza. Existen varios destinos en los que poder poner en práctica esta relajante actividad, pero uno de los más reconocidos en España es el bosque de secuoyas de Cantabria. Encontrarás casi 850 ejemplares de esta especie de una altura media de 40 metros entre las localidades de Comillas y Cabezón de la Sal. Hay una ruta delimitada de casi dos kilómetros, perfecta para realizar en familia y desconectar. El silencio y la luz que se cuela entre las hojas serán tus compañeros. También se realizan recorridos guiados en los robledales y hayedos milenarios de Ultzama (Navarra). Prueba con paseos conscientes en los que relajar la mente y ver tonalidades de verdes, naranjas y rojos intensos.
Curiosear sobre leyendas y mitos
Los bosques también son espacios de leyenda… ¿Sabías que en la isla canaria de La Gomera existe un bosque de laurisilva que es uno de los más antiguos de Europa? Lo encontrarás en el Parque Nacional de Garajonay: una auténtica selva en la que un guía puede hablarte de sus secretos como la leyenda de Gara y Jonay, dos jóvenes cuyo amor estaba prohibido. ¿Más lugares con historias curiosas? Por ejemplo, el pueblo de Zugarramurdi, en Navarra. Cuenta la leyenda que existían brujas en el bosque cercano a este pueblo que celebraban aquelarres. Atrévete a adentrarte en la impresionante cueva de Zugarramurdi (un túnel natural de 120 metros de largo y 12 metros de altura) y a visitar el Museo de las Brujas. Otra recomendación: la isla de Cortegada (en Galicia), que además de diferentes misterios alberga el mayor bosque de laureles de España, una auténtica rareza botánica.
Buscar duendes con los niños
Entre otros muchos lugares, los niños acabarán encantados en el Bosque Mágico de la Fuente del Pino (San Leonardo de Yagüe, Soria), donde a los pies de casi cada árbol hay “viviendas peculiares de gnomos” o en la aldea de cuento de San Clodio (Lugo), donde veréis grandes figuras de hormigas hechas de materiales reciclados. También podéis disfrutar del Burosque encantado de Bureta (Zaragoza) o del Bosque Encantado de San Martín de Valdeiglesias (muy cerca de la ciudad de Madrid): un jardín botánico con más de 300 esculturas vivientes.
Escuchar música y mucho más
En España existen diferentes festivales musicales y otros eventos culturales que tienen lugar en mitad de la naturaleza. Uno muy especial es el festival “El bosque sonoro” en Mozota (Zaragoza). En esta pequeña aldea de unos 130 habitantes tienen lugar una serie de conciertos en los que por cada entrada que se compre, se comprometen a plantar un árbol. La idea es renaturalizar la zona, evitar la despoblación y apoyar el tejido cultural local. Otra propuesta interesante es la de las Rutas de los Paisajes Sonoros en la Selva de Irati, unos bosques con decenas de historias en homenaje a los cuales se han preparado cinco podcast (en castellano y euskera) que te puedes descargar a través de señales QR que encontrarás en el camino. Los protagonistas de estos relatos son personajes como un anciano pastor de la Prehistoria o un cantero romano.
Busca espacio y tiempo para disfrutar de los parajes increíblemente hermosos de los bosques de España y de costumbres y modos de vida con siglos de antigüedad. Y hazlo siempre con respeto, pensando en las generaciones que están por venir.