Existen muchas maneras de conocer una ciudad. Llega el momento de ocuparnos de una de las más auténticas: a bordo de sus medios de transporte. Bilbao cuenta con una moderna red pública y otros sistemas privados en los que realizar originales recorridos y, sobre todo, sostenibles. Descubre cómo obtener panorámicas diferentes de la Mejor Ciudad Europea 2018, según la organización internacional The Academy of Urbanism, y el área metropolitana que se extiende a ambos lados de la ría del Nervión.
Transporte sostenible
El tranvía de Bilbao atraviesa la ciudad desde la estación de Bolueta al parque de La Casilla. Una sola línea, dieciséis paradas y un recorrido en los que el viajero puede hacerse una idea bastante precisa del trazado urbano. Comodidad y medio ambiente se dan la mano en esta opción de transporte sostenible que bordea las siete calles del Casco Viejo y tiene parada en lugares imprescindibles como el teatro Arriaga, el Palacio Euskalduna, el Museo Guggenheim, el Estadio de San Mamés y los quince edificios de estilo modernista del hospital de Basurto.
Y de las vías horizontales a las inclinadas del funicular que sube hasta el monte Artxanda. La recompensa será obtener una de las vistas más impresionantes de Bilbao durante los aproximadamente 800 metros de ascensión, entre la estación del Paseo del Campo Volantín –donde se coge el funicular- hasta la cima, a unos 226 metros de altura. Se recomienda elegir uno de los locales de cocina tradicional vasca, que acostumbran a elegir los propios bilbaínos los fines de semana en esta zona, para hacer más sabrosa la ruta.
La Ría del Nervión en barco
La ría siempre ha marcado el carácter de Bilbao, antes muy industrial, pero con el inicio del siglo XXI su protagonismo se ha multiplicado. Una práctica y cómoda manera de entenderlo es realizando alguna de las visitas marítimo-culturales por la ría del Nervión en cualquier época del año.
Esta opción da la posibilidad de obtener una visión conjunta de la nueva arquitectura y los paisajes que, a ambos lados de su ría, han revolucionado la ciudad: el puente de Deusto, las pasarelas de Santiago Calatrava y de Arata Isozaki, las torres del complejo Isozaki Atea, el Palacio Euskalduna o el Museo Marítimo. Las opciones desde el muelle de la plaza Pío Baroja, frente al Ayuntamiento, suelen incluir paseos hasta Zorrozaure o bien, una alternativa de dos horas de travesía hasta Portugalete.
El Puente Colgante de Portugalete
Pocas ciudades pueden presumir de tener un puente transbordador de estructura de hierro aún en funcionamiento. Entre las localidades de Portugalete y Getxo, en el área metropolitana de Bilbao, se encuentra el primero construido en el mundo. Ya solo por eso es recomendable visitar esta obra declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO en 2006.
Además de cubrir el trayecto que une las márgenes izquierda y derecha de la ría a bordo de la barca que cuelga de su estructura, es posible hacer una exploración completa de este Puente Bizkaia o Puente Colgante tomando un ascensor panorámico hasta la pasarela peatonal situada a 50 metros de altura. Desde allí se puede observar con detalle la maquinaria y, lo mejor de todo, alzar la vista a la bahía del Abra, donde la ría se funde con el mar abierto.Un complemento interesante en esta zona es hacer una excursión, diurna o nocturna, en el tradicional bote Euskal Herria y conocer otras localidades de la desembocadura de la ría como Algorta o Santurtzi.
Navegación gourmet y avistamiento de cetáceos
Si después de conocer los elementos imprescindibles de la transformación cosmopolita de Bilbao y sus alrededores aún quedan ganas de probar otras experiencias originales, es recomendable seguir leyendo.
El avistamiento de cetáceos sobre barcos equipados con hidrófonos para escuchar a los mamíferos marinos está cada vez más extendido en la provincia de Bizkaia. Se trata de excursiones didácticas por la costa vasca cuyo objetivo es concienciar sobre la importancia de la conservación de estos animales: delfines, ballenas, aves marinas… Otra opción: degustar una barbacoa sobre una embarcación circular con capacidad para nueve personas. Diversas empresas ofrecen alquiler de embarcación a vela o a motor para navegar por la ría de Bilbao. Además hay otras propuestas más exclusivas como un show cooking con chef a bordo. Y es que, en Bilbao, vivir toda una experiencia gastronómica flotando a orillas del Guggenheim, ¡es posible!